Después de hacer esta ensalada de patatas, receta marroquí, prometo adentrarme más en la gastronomía de este país. Nos ha encantado. No os desaniméis por ver muchos ingredientes, es muy especiada, realmente sencilla y 200 kcal por ración, así que light!
Es típica de la región de Mequinez, ingredientes sencillos y sabor excepcional, insisto y lo he puesto en el título, pero está deliciosa.
INGREDIENTES
- 750 grs de patatas nuevas, lavadas
- 300 grs de tomates pelados, sin semillas y troceados (podéis usarlos de conserva, yo estos días los tengo de la huerta)
- 100 ml de agua (poca, tiene que quedar seca)
- 2 cucharadas de concentrado de tomate (yo lo compro en Mercadona, siempre tengo de reserva, al final hay tantos que es fácil toparse con uno)
- Media cucharadita de sal
- 1 cebolla rallada (con el rallador es rápido, no seáis vagos, le queda muy bien)
- 1 diente de ajo machacado
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Hebras de azafrán
- Un poco de jengibre en polvo (yo lo tenía de Zanzibar :-) )
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de comino molido
- Perejil picado fino
- Cilantro fresco picado fino (importante este ingrediente, lo venden en el Corte Inglés, en Galicia en los Gadis, no es difícil de encontrar)
- Pimienta negra molida
- 1/2 limón exprimido
- Un poco de pimienta cayena
ELABORACIÓN
Esta lista de ingredientes os puede parecer eterna, pero la mayor parte son especias.
Cuece las patatas unos 20 minutos, hasta que estén cocinadas.
Mientras tanto prepara los tomates, ralla la cebolla, machaca el ajo y resérvalo junto con el agua, el concentrado de tomate, la sal, el pimentón, el azafrán, el jengibre (importante) , 1/2 cucharada de aceite.
Cuando las patatas estén listas déjalas enfriar un poco y córtalas en dados.
Pon en una sartén al fuego todos los ingredientes anteriores y deja que se cocine unos ocho minutos, hasta que el tomate esté listo.
Incorpora las patatas, el comino, el perejil y el cilantro. Sacude la sartén para que se mezcle.
Añade el resto del aceite y la pimienta molida junto con la cayena. Al final añade el zumo de limón.
Sírvela templada.
Os prometo que vale la pena... ánimo, es muy fácil y con organización en media hora está lista...
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